El aura combina el cuerpo etéreo, cuerpo emocional y cuerpo
biológico, y lleva como sello la información de nuestras almas y nuestro
camino espiritual.
El aura está compuesta en parte por el sistema de chakras.
Todos nuestros pensamientos, sentimientos, y experiencias están
reflejadas en el aura, al igual que energía que atraemos de nuestro
entorno.
En este sentido, el alma refleja nuestra energía y atrae
energía de otros cuerpos y ambientes.
Al igual que todo lo demás
en el universo, el aura es vibración y como tal, responde a otras
vibraciones.
De esta manera, vibraciones en forma de pensamiento,
sentimiento o interacción con otras energías (en el espacio o de otras
personas), afectan y moldean la vibración del aura.
Es fácil ver
el aura? Realmente el aura no es visible a plena vista, aunque existen
personas, sobre todo niños, que pueden ver algunas de sus capas.
Típicamente, el aura se ve como capas de color que rodean al cuerpo físico.
Para qué ver el aura? Porque contiene información física y también espiritual y emocional del sujeto.
Está información influye en los colores del aura, haciéndolos más
claros o turbios. Al ver el aura, podemos identificar problemas físicos o
de carácter de la persona.
El aura también refleja pensamientos,
por lo que ver el aura nos deja saber lo que la persona piensa incluso
antes de que ésta actúe, y también nos ayuda a determinar la honestidad
detrás de sus acciones y palabras.
Las personas más avanzadas
espiritualmente tienen auras más claras y brillantes. Mientras que los
seres más atrasados tienen colores turbios.
4 aspectos para ver en el aura:
Cuando vemos el aura, nos queremos concentrar en cuatro aspectos
principalmente: el color, la claridad, la forma y la localización.
El color o colores del aura de una persona dicen mucho de ella. Hablan
de sus intenciones y su esencia. Cada color refleja una cualidad.
La claridad de los colores del aura hablan de la cantidad o deficiencia
de dicha cualidad en la persona en cuestión. Por ejemplo, si el rojo
indica pasión.
Un tono claro y brillante de rojo indica que la persona
es dedicada, alegre y enamorada de la vida y de lo que hace.
Pero un
tono turbio de rojo, casi marrón, puede indicar pasión manifestada en
rabia y violencia.
La localización del color también nos habla de
la cualidad. Por ejemplo, no es lo mismo un color amarillo alrededor de
la cabeza que puede indicar inteligencia, que un color amarillo en el
pecho, que puede indicar compasión.
La forma del aura también nos
dice mucho. El aura no es necesariamente consistente. Puede tener
ondulaciones, puntas y vacíos. Estos pueden indicar lesiones físicas,
por ejemplo.
Como ver el aura:
1. Para aprender a ver el aura, empiece con partes del cuerpo como las manos y la cabeza.
2.Posicione a la persona en contra de un fondo sólido, como una pared o una sábana.
3.Determine la luz del lugar de manera que los bordes del cuerpo
contrasten suficiente con el fondo que ha elegido. La idea es poder ver
el borde del cuerpo casi como un trazo claro de lápiz.
4.Empiece
por mirar fijamente un punto específico de la parte del cuerpo en
cuestión. Ya sea por ejemplo, la coronilla o la punta de un dedo. Cierre
sus ojos levemente pero no del todo. Concéntrese por un tiempo sin
cambiar de luz o lugar.
5.Al principio, muy seguramente verá solo
un cuerpo sutil del cuerpo etéreo, manifestado en una luz azul claro,
muy similar a la parte azul de una llama de fuego.
6.Al ver la luz azul, no cambie de fondo ni desespere.
Con la práctica, esta luz azul se hará más fuerte y eventualmente
pasará a un segundo plano y colores con apariencia gaseosa empezarán a
aparecer – estos son los colores del aura.
7.Tenga mucha
paciencia. Ver el aura no es cosa de media hora o de un día. Algunas
personas tienen la facilidad pero la mayoría tenemos que practicar una y
otra vez. Sin embargo, tenga confianza en que sí es posible
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario